Una tarta contundente con un sabor sorprendente para la sencillez de la receta..
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Ingredientes:
1 paquete de sobaos de buena calidad (o un bizcocho de mantequilla casero)
250gr de fresas
1 sobre de gelatina de fresa
500 ml nata para montar
Crema de orujo, baileys o licor al gusto.
Mermelada de fresa.
Azúcar para montar la nata.
Montaje:
Laminamos las fresas y reservamos unas pocas para mezclar con la nata, elaboramos el sobre de gelatina de fresa según las instrucciones pero reduciendo la cantidad de líquido a 2 vasos de agua (en mi sobre indicaba un litro), añadimos las fresas laminadas y mezclamos bien. Vertemos sobre el molde seleccionado y dejamos enfriar para que asiente (media hora en el congelador, 2 horas en nevera).
Cuando lo tengamos listo en el mismo molde y sobre la gelatina colocamos una base de sobaos o de bizcocho y con un pincel, brocha o cucharita mojamos con el licor elegido (en mi caso crema de orujo), no mucho, unas 4 cucharadas para toda la base. Extendemos una capa de mermelada de fresa (ideal si es casera, si no, una de buena calidad..a mi me da buen resultado la de la Vieja Fábrica) y luego extendemos una capa gruesa de nata montada con las fresas que habíamos reservado.
Repetimos la operación, otra capa de sobaos con licor y otra de mermelada y de nata con fresas, terminamos con una capa de sobaos sin licor (será la base y es mejor que no quede muy blanda, con la humedad de la nata y el relleno es suficiente para que no nos quede nada seco).
Metemos en la nevera y dejamos reposar un mínimo de 2 horas (yo la hago la noche anterior y la dejo toda la noche tapada con papel de plata para que no adquieran olores.
Pasamos la punta de un cuchillo redondo por los bordes del molde para despegar bien los laterales y le damos la vuelta, decoramos los bordes con nata montada y la servimos!!
Es una lástima pero no conservo fotos del corte.
¡¡Que aproveche!!
